Mientras la Secretaría de Transporte de la Nación asegura que ya se entregaron 11 millones de tarjetas SUBE, los puntos de entrega para quienes quieran obtener el plástico se redujeron de los 600 que había en la vía pública a 10. Ayer, la tarjeta se podía gestionar y pagar sólo en una pocas sucursales de los correos Argentino, Oca y Andreani, que se destinaron en el área metropolitana (ver infografía).
Además, las quejas de los usuarios que la tramitaron por Internet no cesan. Hoy, la principal problemática que plantean los pasajeros es que han recibido notificaciones por "inconsistencia" en los datos de los domicilios consignados y muchos deben retirarlas personalmente en distintos puntos asignados. Otros, en cambio, denuncian que al pasar la tarjeta SUBE por un lector de un colectivo les consumió casi la totalidad del dinero que tenían cargado.
Los usuarios que gestionaron su tarjeta via on line con anterioridad al 3 de marzo, tampoco pueden constatar en la pagina web de la SUBE el estado del trámite iniciado.
Ayer, Sandra Battaglia contó que recibió un mail donde el correo no identificaba su dirección consignada. "Sin embargo, lo curioso fue que ese mismo sábado llegó una tarjeta SUBE a mi dirección, ¡que era de una vecina! Estas cosas no se entienden demasiado", contó Battaglia.
Según fuentes oficiales, la "gran mayoría" de los usuarios ya tienen el buscado plástico magnético, aunque no dieron precisiones sobre cuántos, de los 3,7 millones de personas que la tramitaron por Internet, aún no la recibieron.
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